Una de las estancias reinas en cualquier hogar es la cocina. Hay familias que hacen su vida prácticamente dentro de ella, si tienen suerte y ésta es grande, una costumbre que viene un poco heredada de la costumbre americana, quienes suelen tener comedor y cocina unidos o, como mucho, tienen una separación un poco ilusoria cuya frontera es una isla o península. Este es uno de los principales motivos por los que no resulta nada extraño que las familias quieran tener una buena cocina, agradable y de diseño.
Este año, desde Milán, cuna de la moda y la tendencia en más de un sector, nos han llegado estilos bastante dispares, algunos clásicos y tradicionales, otros rústicos, y otros que más parecen una cocina futurista que otra cosa.
- Unificación: A pesar de que para algunos es una aberración, más que nada por la falta de originalidad o color, utilizar un mismo material en mesadas, muebles, pisos y hasta frentes de cocina, es algo que está de moda. Esto provoca que toda la cocina luzca con un aspecto limpio y homogéneo, algo que a muchas familias gusta pero que a otras aburre. No es una buena opción cuando se cuenta con una cocina pequeña pues este estilo tiende a dar la sensación de minimizar el espacio.
- Fuera brillos: La cocina brillante seguirá teniendo sus adeptos, pero a la par va dejando lugar a unas texturas más crudas y naturales que, como el satinado o el acabado leather en piedra natural, se imponen cada vez con más fuerza. ¿Ventajas? Para empezar, ofrecen un tacto agradable y cálido, son elegantes y marcan mucho menos las huellas. «Hablamos de unas superficies sensuales. Uno al tocarlas siente la sensación de cuero, más allá de que hablamos de piedras de altísima durabilidad», dice la diseñadora de interiores Matty Costa Paz, que remarca que «son materiales para nada fríos».
- ¿No hay electrodomésticos? Escondes la nevera y el lavavajillas dentro de un mueble de cocina ya es una realidad. Son los llamados electrodomésticos invisibles y ofrecen un look muy elegante a la estancia, no obstante hay quien prefiere tener bien presente la puerta de su nuevo frigorífico, sobre todo cuando te has dejado una pasta en él.
- Tonos tierra: La cocina totalmente blanca, tipo laboratorio, parecería quedar atrás, en tanto se abre un mundo de posibilidades de la mano de una paleta que suma grises, negros, verdes y ocres.
- Materiales duraderos: Integrar la cocina a la vida cotidiana de una casa requiere de la presencia de unos materiales de gran durabilidad y resistencia, y Milán no fue ajena a esta tendencia: tanto Neolith como otras piedras naturales -mármoles, granitos, cuarcitas- dejaron plenamente demostrado que son aptas para todo tipo de aplicaciones, uso interior y exterior, resistentes como nada e íntegramente reciclables.
Interiorismo
Lógicamente, para conseguir crear estos ambientes que son tendencia, no basta con un buen equipo de reformas, hay que tener detrás de ese diseño a un buen interiorista. En Alfa Interiorismo nos han asegurado que hay quienes les han llamado tras realizar una reforma en casa, sobre todo en baños y cocinas, que no ha quedado tal y como ellos deseaban, por lo que acaban realizando una doble reforma. Si buscas diseño, ve directamente a profesionales, a no ser que tengas muy claro qué quieres y cómo lo quieres.
También está muy de moda la decoración con luces led, algo que en la cocina puede suponer una buena idea cuando se coloca esa tira por debajo de los muebles de cocina. La luz que emite la tira de led nos permite cocinar encima de la encimera con iluminación directa, algo que con la luz de techo no suele ser posible.
Pero, según los interioristas ¿qué elemento es el que está pegando más fuerte esta temporada? Sin lugar a dudas, y sin dudar, el espejo como salpicadero.
Colocar espejo en el entrepaño o salpicadero de la cocina parece ser una nueva tendencia decorativa. En sustitución de la encimera o de los típicos azulejos cada vez hay más cocinas con esta solución que se coloca incluso, detrás de los fuegos. Esta tendencia tiene algunas ventajas: recoge y refleja la luz, agranda el espacio, tiene un precio accesible, es fácil de instalar… pero también sus inconvenientes: es más frágil que la cerámica, se mancha con facilidad y cuesta mantenerlo limpio, ver tu reflejo constantemente puede resultar inquietante, etc.
¿Y tú, cómo harías tu cocina ideal?